Sentir no es un error, es una forma de saber que algo importa. Lo que duele no desaparece por ignorarlo, pero sí puede cambiar cuando se mira con amor y sin juicio. La terapia es ese espacio donde lo que callaste encuentra palabras, y lo que cargaste empieza a compartirse.
Sienten que, aunque hablan, no logran entenderse. Para quienes repiten los mismos conflictos y ya no saben cómo salir del ciclo. También para quienes atraviesan un cambio importante, una crisis o una duda sobre continuar juntos, y quieren tomar decisiones con más claridad.
No es necesario estar al borde de la ruptura: este espacio también es para quienes desean fortalecer el vínculo, escucharse mejor o aprender a cuidarse sin perderse en el otro.